Y... lo que encuentro...

No fue rápido ni sencillo... encontrar mi tesoro. Hay dos puntos importantes que tienen mucho valor en la búsqueda que he desarrollado estos últimos tres años... gracias a mi actitud y al cariño de la gente he logrado llegar al final de camino y cantar "Victoria".

Con mi actitud he logrado avanzar, a veces por caminos pantanosos, en otras ocasiones por intrincados senderos, internos y externos. Fue así como un día encontré las soluciones necesarias para estar en movimiento, para estar en la búsqueda de mi historia, presente, pasada y futura. Y las respuestas fueron llegando de a una, día a día.

Sin el cariño de la gente que me encontré en ese difícil camino hubiera transitado una búsqueda sin sentido, me hubiera metido en callejones sin salida. No fueron pocas las mujeres y los hombres de este continente y de mi país que, de diversas maneras, contribuyeron a que encuentre mi camino. Fueron mas de 1000 seres humanos los que conocí durante los últimos 3 años. Antes de decidir mi cambio de vida y en mis primeros pasos del proyecto jamás me imaginaba conocer, encontrar, hablar y fundamentalmente conectarme con tanta gente que, a priori, no formaba ni existía en mi vida. Fue mi decisión de salir a buscar mi historia lo que me permitió conocer tantas personas y aprender de ellas.

Encontrar el amor y estar con la gente son los dos tesoros y premios de esta larga búsqueda.